martes, 30 de octubre de 2018

Embriología del corazón



EMBRIOLOGÍA DEL              CORAZÓN
 
Resultado de imagen para origen embriologico del corazonEl corazón se forma a partir de dos primordia de mesénquima cardiogénico, que es inducido por el endodermo faríngeo para formar una red plexiforme de capilares en una zona en forma de herradura cardiogénica. Estos capilares se fusionan entre sí para formar el tubo endocárdico y el mesénquima restante forma los mioblastos que darán origen al miocardio.
Este tubo también tiene forma de herradura; cada rama de la herradura está organizada en regiones que dan origen a los segmentos del corazón que en sentido caudocraneal son: seno venoso, atrio, ventrículo primitivo (futuro ventrículo izquierdo), bulbus cordis (porción trabeculada del ventrículo derecho), cono o infundíbulo (vías de salida) y tronco (aorta ascendente y tronco de la arteria pulmonar).
Durante la tubulación del embrión los dos tubos cardíacos se acercan a la línea media donde se fusionan y forman el corazón tubular primitivo recto, éste se tuerce a la derecha para formar el asa cardíaca bulboventricular ubicada en la cavidad pericárdica. La torsión derecha del asa posiciona al ventrículo derecho hacia el lado donde se ubica el atrio derecho y coloca al ventrículo izquierdo hacia el atrio izquierdo.
Al crecer caudalmente el asa, los atrios se ubican por encima de los ventrículos, de esta manera las cámaras cardíacas se acomodan espacialmente para facilitar la conexión atrioventricular concordante, la cual se establece como consecuencia de la dilatación del canal atrioventricular el cual lo hace de izquierda a derecha permitiendo la conexión entre los atrios y sus respectivos ventrículos.
El cuerno derecho del seno venoso se incorpora al atrio derecho, donde forma su porción sinusal y el cuerno izquierdo se transforma en el seno venoso coronario que se abre al atrio derecho. A partir de esta etapa se inician los procesos de tabicación, los atrios se separan por la formación del septum primum y del secundum. El canal atrioventricular se divide en dos por la formación de las almohadillas endocárdicas que al fusionarse forman el tabique atrioventricular, quedando separados los canales atrioventriculares derecho e izquierdo. Los ventrículos se separan por la formación del tabique ventricular primitivo y el tabique conal.
El ventrículo derecho se continúa con el cono y éste con el tronco formando un segmento continuo. En el tronco-cono que se tabica por la formación de dos crestas tronco-conales de trayecto espiral con un giro de 180º, que se entrecruzan en el espacio, la dorsal deriva de las crestas neurales y la ventral del mesénquima cardíaco.
VIDEO
https://youtu.be/39Si-2ngP9A

miércoles, 24 de octubre de 2018



Tejido Epitelial

Tipos de tejido epitelial

El tejido epitelial (o epitelio) es un tejido que recubre las cavidades y las superficies estructurales por todo el cuerpo. Muchas glándulas también se forman a partir de este tipo de tejidos. Se encuentra en la parte superior del tejido conectivo, y las dos capas están separadas por una membrana basal. En los seres humanos, el epitelio es uno de los principales tejidos corporales, junto con el tejido conectivo, el tejido muscular y el tejido nervioso. El tejido epitelial se forma por la expresión de la molécula de adhesión e-cadherina, en contraposición a la n-cadherina, que es utilizada por las células del tejido conectivo. Las funciones de las células epiteliales son: secreción, absorción, protección, transporte transcelular, detección de señales y permeabilidad selectiva.


El epitelio recubre tanto el exterior (piel) como el interior de las cavidades y el lumen de los órganos. La capa más externa de nuestra piel está compuesta de células epiteliales queratinizadas, que son células muertas, estratificadas y escamosas. El tejido que recubre el interior de la boca, el esófago, y parte del recto, se compone de células epiteliales no queratinizadas, estratificadas y escamosas. Algunas superficies que separan las cavidades corporales del exterior están recubiertas por células epiteliales simples escamosas, columnares, o seudoestratificadas. Otras células epiteliales recubren el interior de los pulmones, el tracto gastrointestinal, el tracto reproductivo y urinario, y forman las glándulas exocrinas y endocrinas.
La superficie exterior de la córnea está recubierta de células epiteliales de crecimiento rápido que se regeneran fácilmente.
Los cuatro tipos básicos de tejido son el tejido muscular, el tejido nervioso, el tejido conectivo o conjuntivo, y el tejido epitelial. El tejido epitelial se distingue del resto por varias características. Las células de este tejido están muy próximas unas a otras dejando un espacio intercelular muy escaso o mínimo, es la característica de cohesión celular.
También está separado del resto por una membrana, la llamada membrana basal, que separa el tejido epitelial del tejido conectivo o tejido subyacente. Las células del tejido epitelial están unidas entre sí formando varias capas con una clara polarización ya que en las células se puede diferenciar en la mayoría de los casos una parte superior o apical y una parte inferior o basal (más próxima a la membrana basal) con características diferentes.
Otra característica del tejido epitelial es que no cuenta con riego sanguíneo propio, es decir, no cuenta con vasos sanguíneos. El metabolismo depende de difusión de oxígeno y nutrientes procedentes del riego sanguíneo del tejido conectivo que sostiene los epitelios.
Los epitelios están en continua regeneración, motivo por el que son más propensos a desarrollar cáncer. De hecho, los carcinomas, nombre que recibe de forma general el cáncer en el tejido epitelial, son los tumores malignos más frecuentes. Son, además, los primeros tejidos que aparecen en la ontogenia durante el desarrollo embrionario. Toda sustancia que expulsa o que entra en el organismo atraviesa algún epitelio.

miércoles, 3 de octubre de 2018

Tejido muscular
Breve explicación de la organización de tejido muscular.
- Generalidades
-Clasificación del tejido muscular
-Explicación de cada uno de los músculos
-Imágenes para la identificación
-Diferencia entre el TM y el TC.
-Discos Intercalares
-Regeneración del tejido muscular

martes, 2 de octubre de 2018


DESARROLLO EMBRIOLÓGICO DE LAS PERSONAS

El desarrollo embrionario es el periodo que se produce entre la fecundación y el parto. Dura normalmente nueve meses, y en cada uno de los trimestres en los que se divide se desarrollan diferentes partes del cuerpo.
Un embrión en la semana ocho de gestación.

Primer trimestre

Se considera la tercera semana de embarazo como la primera efectiva, pues en las dos primeras semanas se produce la ovulación y desprendimiento del óvulo que será fecundado. Esta fecundación tiene lugar ya en la tercera semana: el óvulo y el espermatozoide se unen formando el cigoto mientras bajan a través de una de las trompas de Falopio.
El cigoto continúa dividiéndose formando las nuevas células, a las que pronto les aparecerá un recubrimiento, denominando a todo el conjunto como blastocisto. La división de células continúa ocurriendo mientras tanto, hasta que en un cierto punto del desarrollo este blastocito se transforma en embrión.
A partir de la décima semana ya no se considera embrión, sino feto. El feto ya mide cerca de 7 centímetros. Durante esta semana también se comienzan a ver los párpados, las orejas y la cara, y la placenta comienza a nutrir al feto a través del cordón umbilical.

Segundo trimestre

Al principio de este trimestre lo más apreciable del feto es su cabeza, que ocupa cerca de la mitad de su tamaño total. Se continúan desarrollando durante estas semanas aspectos como las uñas o los genitales, y la cara ya está formada. Los párpados cierran los ojos del bebé, y hasta la 28 semana permanecerán así.
El feto empieza a hacer sus primeros movimientos entre las semanas 15 y 18. A estas alturas, el feto ya tiene una medida cercana a los 18 centímetros y pesa cerca de 200 gramos. Los huesos se vuelven más duros y comienza a aparecer el primer pelo, denominado lanugo. Entre las semanas 19 y 21 el bebé comienza a oír, y además se mueve de forma más activa, de modo que la madre puede llegar a sentir sus movimientos.
En la semana 22 el lanugo ya se ha extendido a todo el cuerpo del feto, apareciendo también las cejas y las pestañas. El bebé también hace su primera deposición, llamada meconio, la cual expulsa por el tracto intestinal. El movimiento también sigue siendo activo, desarrollando ahora  los músculos y pudiendo escuchar los latidos de su corazón.
Al final de esta etapa, se desarrollan las vías respiratorias del bebé y la médula ósea comienza a producir células sanguíneas. El feto también comienza a almacenar grasa.

Tercer trimestre

El bebé comienza a terminar de desarrollar diferentes partes de su cuerpo: todo lo relacionado con los ojos y las huellas de los pies ya son bien perceptibles. Los pulmones también alcanzan un alto grado de funcionamiento, aunque no el necesario para sobrevivir fuera del útero. El feto además es capaz de oír ruidos fuertes del exterior.
Entre las semanas 27 y 30 el bebé vuelve a abrir los párpados, y el sistema nervioso se desarrolla mucho, sobre todo en el cerebro y para las órdenes de diferentes funciones del cuerpo. El sistema respiratorio comienza a producir agente tensioactivo, que hace que los alveolos puedan llenarse de aire cuando nazca. El tamaño del feto para la semana 28 ya ocupa la mayor parte del útero, y se suele posicionar de forma invertida, de forma que tenga más facilidad para mover las rodillas y los pies.
A partir de la semana 31 el bebé comienza a retener hierrocalcio y fósforo en su organismo, lo que impulsa aún más el desarrollo del cuerpo. Los huesos ya están completamente formados, aunque aún blandos. El sistema respiratorio también continúa su desarrollo, pero los pulmones aún no son lo suficientemente maduros.
Para la semana 35 el bebé ya pesa cerca de 2,5 kilos, y su corazón y vasos sanguíneos ya se han formado por completo, como también lo están los músculos y los huesos. El bebé además adquiere patrones de sueño.
En las últimas semanasentre la 38 y la 40, desaparece el lanugo excepto de hombros y brazos, siendo el cabello desarrollado en la cabeza además más grueso y resistente. Aparecen también los brotes mamarios.
A partir de la semana 40 se considera que el embrión está desarrollado por completo y listo para nacer, variando la fecha en que ocurre.


miércoles, 19 de septiembre de 2018

Tejido muscular

Origen embriológico: tejido muscular 

Resultado de imagen para origen embriologico del tejido muscular


El tejido muscular se deriva de la hoja germinativa mesodermo. 
Al unirse el ovulo con el espermatozoide se forma el huevo o cigoto, el mismo que luego de múltiples divisiones da origen a diversas estructuras propias del embrión como son: mórula, blástula y gástrula. En el embrioblasto se forman las membranas embrionarias u hoja germinativa trilaminar, constituida por el ectodermo, mesodermo y endodermo.
Del ectodermo: se origina la piel, pelos, glándulas sudoríparas y sebáceas, sistema nervioso, la cavidad bucal, nasal y el ano.
Del mesodermo: se forman los tejidos adiposos, cartilaginosos, musculares y óseos, las venas, las arterias, el aparato excretor y reproductor.
Del endodermo: se originan el aparato digestivo, laringe, hígado, páncreas, oído medio, vejiga y aparato respiratorio.
El tejido muscular es el responsable de los movimientos corporales. Está constituido por células alargadas, las fibras musculares, caracterizadas por la presencia de gran cantidad de filamentos citoplasmáticos específicos.
Las células musculares tienen origen mesodérmico y su diferenciación ocurre principalmente en un proceso de alargamiento gradual, son síntesis simultánea de proteínas filamentosas.
De acuerdo con sus características morfológicas y funcionales se pueden diferenciar en los mamíferos tres tipos de tejido muscular, el músculo liso, estriado esquelético y cardiaco.
Músculo estriado o esquelético
Está formado por haces de células muy largas (hasta de 30 cm.) cilíndricas y multinucleadas, con diámetro que varía de 10 a 100 µm., llamadas fibras musculares estriadas.

Músculo cardíaco

Constituido por células alargadas, formando columnas que se anastomosan irregularmente. Estas células también presentan estriaciones transversales, pero pueden distinguirse fácilmente de las fibras musculares esqueléticas por el hecho de poseer solo uno o dos núcleos centrales. La dirección de las células cardíacas es muy irregular y frecuentemente se pueden encontrar con varias orientaciones, en la misma área de una preparación microscópica, formando haces o columnas.
Esas columnas están revestidas por una fina vaina de tejido conjuntivo, equivalente al endomisio del músculo esquelético. Hay abundante red de capilares sanguíneos entre las células siguiendo una dirección longitudinal a éstas.
La célula muscular cardiaca es muy semejante a la fibra muscular esquelética , aunque posee más sarcoplasma, mitocondrias y glucógeno. También llama la atención el hecho de que en los músculos cardiacos, los filamentos ocupen casi la totalidad de la célula y no se agrupen en haces de miofibrillas.
Músculo visceral o liso
Está formado por la asociación de células largas que pueden medir de 5 a 10 um. de diámetro por 80 a 200 µm. de largo. Están generalmente dispuestas en capas sobre todo en las paredes de los órganos huecos, como el tubo digestivo o vasos sanguíneos. Además de esta disposición encontramos células musculares lisas en el tejido conjuntivo que reviste ciertos órganos como la próstata y las vesículas seminales y en el tejido subcutáneo de determinadas regiones como el escroto y los pezones. También se pueden agrupar formando pequeños músculos individuados (músculo erector del pelo), o bien constituyendo la mayor parte de la pared del órgano, como el útero.
Las fibras musculares lisas están revestidas y mantenidas unidad por una red muy delicada de fibras reticulares. También encontramos vasos y nervios que penetran y ramifican entre las células.
En el corte transversal el músculo liso se presenta como un aglomerado de estructuras circulares o poligonales que pueden ocasionalmente presentar un núcleo central. En corte longitudinal se distinguen una capa de células fusiformes paralelas.